Mirando hacia el frente, en filas y con voz firme, un grupo de feministas chilenas coreó el pasado 25 de noviembre en Santiago y otras ciudades del país, un mensaje a viva voz contra la violencia de género, en medio de la convulsión social que sacude al país desde hace 43 días. El mensaje caló hondo en las redes sociales y se replicó por mujeres de varias ciudades del mundo.